#Ysi juntamos café y gatitos?

Los aquí presentes estamos acostumbrados al café para llevar, que nos permite simultanear disfrutar de nuestro café favorito con otras actividades. Y es que hay mil cosas que quedan de lujo como complemento del café: charlar, pasear, leer, ir de compras o… ¿por qué no?, encontrar una potencial mascota. Las redes sociales son testigo de que el hombre es un animal amante de dos cosas fundamentales: el café y los gatos. ¿Y qué pasa cuando se juntan? Que surgen proyectos como La Gatoteca.

Eva es una apasionada de la cultura japonesa, y gracias a ese hobby descubrió a lo que ahora dedica su tiempo y esfuerzos: en Japón existen los llamados neko-cafés, cafeterías habitadas por gatos a las que acudir para el tradicional té con el ‘twist’ de estar acompañado por comensales felinos. Eva estudió diseño de interiores y, gracias a la inspiración de los neko-cafés, llevó su proyecto final de carrera lo más lejos posible: a la realidad. Así, cambió Aragón por Madrid y añadió un nuevo toque de originalidad a Lavapiés (aunque ya tenga de sobra) abriendo las puertas de La Gatoteca de la mano de la Asociación Abriga.

Pero La Gatoteca en sí no es un neko-café, ya que la finalidad primordial (aunque es un objetivo más que conseguido, sólo hace falta ver las sonrisas en todas las caras amantes de los gatos que pisan La Gatoteca) no es la de tomar un café entre compañeros “gatunos”: es dotar a gatos más mayores de la posibilidad de ser adoptados y de recibir cariño y cuidados. Quienes entran a La Gatoteca pueden pasar un rato agradable disfrutando de sus animales favoritos, y pueden adoptarlos si surge el amor a primera vista. Los que ya tengan un gato pero quieran recibir orientación sobre la mejor manera de cuidarlos también pueden beneficiarse del proyecto, ya que se ofrecen consultas de comportamiento y talleres.

Y es que… ¿en qué otro lugar de Madrid podríamos encontrar reunidos a hipsters, amantes de los gatos, jóvenes pidiendo a sus padres un gatito, e incluso turistas? Un lugar único, en el que los amantes de los gatos se sentirán tan cómodos como en el salón de su casa. Pero no un salón cualquiera: uno con bebederos y comederos y cojines para atender a las necesidades de los verdaderos dueños del salón; porque los gatos no son sólo los reyes de las redes sociales.