07.07.17 / PLANES
La verbena, el ambiente, la comida… Muchas veces las fiestas patronales no tienen nada que envidiar a un buen festival de música y es lo que hoy en Kaiku Caffè Latte os vamos a contar: las pequeñas grandes cosas de una buena fiesta patronal que todo el que ha vuelto al pueblo en verano ha vivido y disfrutado.
Las fiestas de pueblos son el must del verano, dejémonos de brunch para pasar al vermú.
Porque cantar canciones viejunas a medianoche es muy #MIMUNDOMISREGLAS.
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Vale que el cabeza de cartel no será Iván Ferreiro o Sidonie, pero sí tendrás es una fiesta patronal tu buena orquesta que tocará los grandes clásicos de toda la vida: “Paquito el Chocolatero”, “I Will Survive” o “Como Una Ola”. Y las cantas como si fuesen la banda sonora de tu vida, y puede que en tu playlist jamás estén, pero sabes que en verano te acompañarán todas las noches en la verbena.
Te olvidas de treintañeros modernos, de camisas de guadros y de guirnaldas de flores en la cabeza. En una fiesta patronal llegan: ¡TUS PRIMOS! La familia se convierte en tu piña “festivalera” y todos los días bailas con tu tía, tu abuela y tus padres. Porque como hemos dicho, las verbenas son universales.
¿Talleres de personalización de jeans?, ¿Fiesta en la piscina con flotadores de flamenco? Para nada, en las fiestas del pueblo se lleva estar en los hinchables, dar una vuelta por el mercadillo y subirte a todas las atracciones (véase los autos de choque).
Otra de las ventajas y una de las cosas que no tienen nada que envidiar una fiesta patronal a un festival de música: la vuelta a casa. Te olvidas de tener que esquivar decenas de tiendas de campaña, bolsas y sacos de dormir, para, simplemente, volver a casa andando y dormir en la plácida cama de toda la vida.
En esto los festivales de música y las fiestas patronales son muy parecidos: para darle alegría al cuerpo tanto si es de día como llegada la tarde, nada como un buen Kaiku Caffè Latte fresquito, para disipar cualquier atisbo de cansancio del día anterior (y el anterior). ¡Disfruta de las fiestas de pueblo como nunca y date un respiro de tanta ciudad!
Y tú, ¿cómo vives las fiestas patronales cada verano? Cuéntanos de qué pueblo eres y alguna anécdota muy de pueblo que recuerdes 🙂
