27.04.22 / PLANES
Sí, es verdad, nos hemos puesto románticos y un poco cursis, pero es que nos han entrado ganas de revivir los mejores besos de película. Esos que han pasado por miles de salas y aún llevamos tatuados en la memoria.
Sabes que en Kaiku Caffè Latte nos encanta el cine, por lo que si en algo somos expertos es en coleccionar escenas míticas. Desde lo más clásico, pasando por el momento más romántico de una película de acción, hasta el legendario no-beso de Orgullo y Prejuicio, este fin de semana querrás maratón desde el sofá.
¿A qué esperas? Coge tu café favorito, acomódate en el sofá y acompáñanos a repasar esas escenas que se han quedado con nuestro corazón y alguna que otra lagrimita de emoción.
En una película de acción y superhéroes también hay tiempo para los besos largos, besos robados y, por supuesto, besos apasionados, ¿por qué no? La película Spider-Man en 2002 fue todo un éxito en pantallas y tiene una de las escenas más míticas de la historia del cine. El larguísimo beso que Jane y Peter Parker (aka Spiderman) se dan en las calles de Nueva York es uno de los besos bajo la lluvia más míticos del cine, tanto que todo el mundo lo ha intentando representar alguna vez en la vida. Parejas besándose pero sin lluvia, y sin un traje de araña, claro.
La pareja del 2004 y una de las películas que marcaron un antes y un después en el mundo de los romances. Desde el más romántico hasta la más «pasota» ha visto El Diario de Noah, a escondidas o no, y es uno de los guilty pleasures de los cinéfilos. Ryan Gosling y Rachel McAdams hacen la pareja perfecta tanto fuera como dentro de la pantalla. El suyo es un beso de película inesperado (también bajo el agua, esto va de besos famosos bajo la lluvia) aviva la esperanza de que el amor dura para siempre, ¿no?
El beso que no fue. Vale que estamos hablando de besos de película, pero Orgullo y Prejuicio es el mejor ejemplo de que no hace falta culminar con un beso para que una película de amor sea buena. El Sr Darcy y Elizabeth Bennet son la anti pareja: se detestan por orgullo y tienen prejuicios el uno del otro. Sin embargo, sus múltiples encuentros fortuitos harán que el amor surja entre ellos. ¿Lo mejor? Que no hay beso, pero sigue siendo una de las mejores películas románticas de la historia.
Humphrey Bogart, Ingrid Bergman y un amor eterno e imposible, ¿quién no se ha emocionado hasta las lágrimas con la historia de Rick e Ilsa? Una de las escenas de amor más emblemáticas es propiedad de Casablanca. Un beso que une en un mundo que se resquebraja.
No puedes llamarte millenial si no has llorado al menos una vez con Mi primer beso. Una de las películas de amor y amistad más tiernas de los años noventa. Es de esas que te estrujan el corazón y tardas unos cuantos minutos hasta que vuelvas a serenarte. Un beso tímido y sutil como son los de la infancia, de la mano de Macaulay Culkin y Anna Chlumsky. Toda una joya vintage.
Lluvia torrencial, un superhéroe cabeza abajo y la chica con la sonrisa más dulce de Nueva York. Tobey Maguire y Kirsten Dunst han calado muy profundo en las fibras cinéfilas. La escena de Mary Jane y Spider-man es uno de los besos bajo la lluvia más míticos del cine, tanto que todo el mundo lo ha intentado representar alguna vez en la vida (con escaso éxito y muchas risas, por supuesto).
La pareja del Diario de Noah es un antes y un después en el mundo de los romances. Ryan Gosling y Rachel McAdams hacen una pareja perfecta e inolvidable. Bajo una lluvia como una cortina de agua, se funden en un beso con el que Noah aviva la esperanza de que el amor durará para siempre, al menos para ellos.
Vale que estamos hablando de los mejores besos del cine, pero Orgullo y Prejuicio es el mejor ejemplo de que no hace falta culminar con uno para que una película de amor sea buena.
El Sr. Darcy y Elizabeth Bennet son la anti pareja: se detestan por orgullo y tienen prejuicios el uno respecto al otro. Sin embargo, sus múltiples encuentros fortuitos harán que el amor surja entre ellos. ¿Lo más interesante? Que no hay beso, pero sigue siendo una de las mejores películas románticas de la historia.
Norte de Italia. Verano. Un adolescente aburrido, holgazaneando y viendo pasar el tiempo mientras toma el sol. Aparece en casa un invitado especial: el nuevo ayudante del padre, un norteamericano muy interesante. Los dos pasan el verano juntos y la química entre ellos es más que evidente.
Call me by your name es una de las películas que marcaron 2018 y con su historia todos se sienten identificados: amores platónicos siempre los ha habido. Ponla en una tarde lluviosa, disfruta con su banda sonora y emociónate con esta película de amor veraniega.
Besos míticos, hay miles en la historia del séptimo arte, pero todos tenemos uno preferido. Cuéntanos, ¿cuál es el tuyo?